No tengo ni idea de por qué, pero este felpudo no ha querido salir en la foto. Se ha enfadado y se ha enrollado como niño caprichoso que enfurruña el ceño y cruza los brazos...
Bueno..., habrá quien diga que es que el dueño no lo ha puesto en su sitio después de fregar, pero eso es más aburrido...
creo que se tomó unas placenteras vacaciones después de tanto trabajar. ¡hasta los felpudos tienen derechos!
ResponderEliminarbesos.
Pues será eso..., vete tú a saber...
Eliminar